Se suicida por no poder parar de masturbarse

Gretchen Molannen, originaria de Florida, tenía una continua necesidad por estar excitada sexualmente las veinticuatro horas del día, esto como consecuencia de una rara enfermedad que le provocaba hasta cincuenta orgasmos seguidos.

El padecimiento se convirtió en un infierno para la mujer de 39 años, su enfermedad diagnosticada como “trastorno de excitación genital persistente” era incontrolable, y algunas mujeres encuentran alivio temporal masturbándose durante largos períodos de tiempo.

No existe ninguna cura para el tratamiento, algunas mujeres han utilizado satisfactoriamente medicamentos que alivian la excitación temporalmente, pero su deseo jamás puede ser calmado.

Un día después que la historia de Gretchen fuera difundida se quitó la vida en su casa de Florida.