Moira Boxall, llegó a su casa en Glasgow, abrió su maleta y se llevó la enorme sorpresa de ver un reptil. De momento, pensó que era un juguete que sus familiares habían puesto en el equipaje para bromear.
Al ver que se movía y pensando que pudiera ser venenosa, Boxall llevó el zapato a su jardín y le puso una caja encima, para que el animal no pudiera escapar.
Llamó a sus familiares en Australia, que a su vez llamaron a la Sociedad Real para la Prevención de la Crueldad contra Animales (RSPCA, por sus siglas en inglés), que llegaron al domicilio y confirmaron que se trataba de una pitón moteada no venenosa.
La serpiente fue resguardada y se encuentra en cuarentena en Escocia y pronto podría convertirse en huésped permanente de un zoológico de Glasgow.
Snake on a plane
This is what Moira Boxall found while unpacking after a trip to Queensland, Australia.
It’s a spotted python and isn’t venomous.
She thought it was a joke snake – until it started to squirm.
(Image from SSPCA) pic.twitter.com/BrMo5Ax39N— James Shaw (@JGBS) 25 de febrero de 2019