Shakespeare, ¿consumía drogas?

La vida y obra de William Shakespeare, poeta y dramaturgo, no deja de ser fuente de datos imprecisos y, por ende, miles de estudios. Hace poco en La Primera Plana te contamos sobre el posible origen del final de ‘Hamlet’, una de sus obras más representativas. Ahora te informamos que un estudio reciente, realizado en Johannesburgo, indica que Shakespeare solía consumir algunas drogas. La investigación fue coordinada por el antropólogo Francis Thackeray.

El estudio se hizo en el Instituto para la Evolución Humana de Johannesburgo. Fue ahí donde el grupo de investigadores dio a conocer su teoría de que el escritor fumaba marihuana e inhalaba cocaína. Dicha investigación ha provocado que Thackeray y sus colaboradores estén solicitando la exhumación del cuerpo de Shakespeare a la Iglesia de Inglaterra. Su cadáver se encuentra en una iglesia de su lugar natal, Stratford-Upon-Avon.

La página web del diario italiano Corriere della Sera publicó algunos datos de la investigación.

Con el cuerpo de Shakespeare se busca, además de esclarecer la razón certera de su muerte, saber si en efecto era un consumidor de drogas. Y es que Thackeray está convencido de que en el jardín de la casa del dramaturgo se encontraron restos de marihuana y otras plantas relacionadas a la cocaína. Esto no gustó para nada a los seguidores y estudiosos de Shakespeare, pero el equipo de antropólogos argumentan que hacer esto es necesario para saber qué tipo de vida llevaba el dramaturgo.

Además, la versión oficial de la historia dice que la cocaína no llegó a Inglaterra sino hasta el siglo XIX. De ser cierta la teoría de los investigadores, los registros tendrían que ser cambiados y revisados. Thackeray empleará varios métodos modernos para evitar mover los huesos del dramaturgo. Además, espera que los resultados de su trabajo puedan publicarse en el año 2016, cuando se cumplan 400 años de la muerte del autor.

¿Tú qué opinas? No olvidemos que la lápida de Shakespeare dice “Bendito sea el hombre que respeta estas piedras y maldito quien mueva mis huesos”. No cabe duda de que el estudio que plantea Thackeray es interesante y, ciertamente, necesario para entender a una de las mentes más brillantes que ha dado nuestra especie. Sin embargo… ¿Será correcto?

Fuente: El Universal

Foto: Inciclopedia