En el contexto de violencia derivada del narcotráfico, 29 personas fueron asesinadas el domingo en una finca de una región norteña de Guatemala que es asolada por narcotraficantes. Se desconoce quién haya cometido el crimen.
La masacre, que incluyó gran cantidad de decapitados, sucedió en el población Caserío La Bomba, en la provincia del Petén, cerca de la frontera con México, informó el vocero de la Policía Nacional Civil, Donald González.
González reveló que la policía investiga si el ataque tiene relación con el asesinato cometido el sábado contra Haroldo León, hermano de Juan José León, alias Juancho, supuesto narcotraficante investigado por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA).
Por su parte, Juan José fue asesinado en marzo de 2008 por un grupo de presuntos Zetas.
La policía guatemalteca dijo que las víctimas de la matanza del domingo estaban atadas y los cadáveres mostraban señales de tortura.
No se han destacado posibles motivos del ataque.
Últimamente, Guatemala se ha convertido en un nuevo punto clave para el tráfico de drogas hacia Estados Unidos. En febrero, las autoridades del país centroamericano levantaron el estado de sitio de dos meses que declararon en la Alta Verapaz, que colinda con el Petén, tiempo en que enviaron fuerzas de seguridad para sofocar la violencia ligada a las drogas.
Fuente: El Universal
