Del tamaño de una tarjeta de crédito, el papiro encontrado contiene seis líneas en griego del Evangelio de San Juan (I, 50-51) y data de entre los años 250 y 350 d.C., según explicó Smith al diario The New York Times.
El documento tiene en su reverso un texto escrito con la misma caligrafía que el fragmento del Evangelio. En opinión de Smith, el papiro formó parte de un rollo y no de un códice, lo que añade un matiz interesante al hallazgo porque los primeros cristianos preferían este antecesor del libro para sus escritos.
El papiro que iba a ser subastado en internet no figuraba en el registro delInstituto de Investigación Textual del Nuevo Testamento en Münster, Alemania, que reconoce unos 130 papiros griegos cristianos.
Smith no reveló la identidad del dueño de este papiro, que no se identificó en el anuncio de eBay pero sí reveló algunos detalles sobre su origen, según recogió en enero el experto en papiros Brice C.Jones: “Es parte de la colección de Harold R. Willoughby, quien investigó junto a Edgar Goodspeed. El señor Willoughby era un viajero y conocido profesor de Teología en la Universidad de Chicago. Al momento de su muerte, tenía una colección de 3.500 biblias”.
Fuente: ABC