El sentimiento de soledad, que todos sentimos en algún punto de nuestra vida, lo relacionamos generalmente con nuestro entornos o las vivencias que hemos experimentado, pero puede haber una explicación un poco más compleja.
De acuerdo con una investigación publicada en Nature concluye que el sentimiento de soledad tiene una determinación genética.
LO QUE DESCUBRIERON
Alrededor de medio millón de personas participaron en este estudio, que reveló que este problema puede estar relacionado con la obesidad, ya que el sentirse solo puede llevar a comer en exceso.
Los genes son culpables de que te sientas solo en un 4 o 5%.
Vincularon 13 patrones genéticos con las preferencias de ir a un bar.
Seis con deseos de ir al gimnasio.
18 con la asistencia a grupos religiosos.
Se comprobó que existen superposiciones genéticas entre la soledad y trastornos como la depresión y problemas cardiovasculares.