Un terremoto registrado en Alaska provocó que, tanto en esta zona, como en partes del oeste de Canadá, se activara una alerta por un posible tsunami, incluso, autoridades de Estados Unidos alertaron a los habitantes de Estados como California, Obregón y Washington para estar preparados por una posible evacuación; la alerta fue cancelada horas más tarde.
Mientras que en Alaska no se registraron daños inmediatos provocados por el sismo que un inicio se dijo había sido de magnitud 8.2; residentes de la zona declararon que:
“Realmente fue un sismo largo, muy fuerte”.