Dicen los conocedores que es bueno saber qué tipo de uvas hay, y cuáles son sus características; básicamente porque las uvas son la materia prima, y de ellas dependerán muchas características del vino, como el sabor y el aroma.
Vinos blancos
Existen cinco tipos de uvas básicos:
Chardonay. Los expertos la consideran la mejor uva blanca. Esta clase de uva se produce en la borgoña francesa, aunque su cultivo se extendió a muchos otros países. De ella se obtienen vinos con mucho cuerpo. Se usa también en los espumosos.
Riesling. Es una una clásica de Alemania, en donde se utiliza para vinos secos y dulces.
Chenin. Originaria de Francia. Es ideal para vinos blancos frutados, ligeros y frescos. Se le conoce también como uva pineau.
Sauvignon Blanc. Proviene de una vid del sudoeste de Francia, actualmente se produce en altas cantidades en Nueva Zelanda y Chile. Es ideal para elaborar vinos de aroma intenso y con matices herbáceos.
Semillón. Es de la región de Bordeaux, en Francia, donde se producen blancos secos y dulces.
Vinos tintos
Son cuatro los tipos básicos:
Cabernet Sauvignon. Se cultiva en todo el mundo vinícola. De ella se elaboran vinos robustos, que añejan bien dando paso a aromas elegantes y sabores complejos.
Merlot. Proviene de una vid originaria de Bordeaux, su aroma y sabor es similar a la cabernet, pero en la boca el Merlot es más débil
Syrah. Nace de una vid persa, pero que luego llegó a Francia. Hoy también la encontramos en todo el mundo. Con ella se producen vinos de color rojo intenso y aroma profundo.
Pinot Noir. Es una uva que se cultiva en escasas regiones, porque fuera de su terreno original (en la Borgoña) no da buenos resultados.
