Tips para aprovechar mejor tu aguinaldo

Cuando diciembre llega muchos paladares ya saborean de forma anticipada el aguinaldo. Y es que cae muy bien un ingreso extra en estas fechas, sobre todo cuando hay deudas y tantos regalitos que comprar.

Pero antes de salir corriendo a gastar todo el aguinaldo en cosas que no necesitas, los expertos ofrecen algunas ideas inteligentes para aprovechar al máximo el pago de esta prestación.

La clave para lograrlo no es encerrarse bajo mil llaves en casa para no gastar, ni destinar 100% de su aguinaldo al pago de sus deudas, coincidieron los especialistas.

Lo recomendable es destinar una parte de este ingreso adicional a diferentes rubros como el pago de créditos, el ahorro, la inversión y, por supuesto, el gasto navideño, el cual también debe presupuestarse.

También figuran recomendaciones como hacer mejoras preventivas a su casa o adquirir tecnología que genere ahorros en el hogar, por ejemplo.

En otras palabras, lo recomendable es diversificar tu aguinaldo.

“Abonar a todas sus deudas y quedarse sin un peso en la bolsa tampoco es buena idea, porque si en enero necesita dinero, tendría que solicitar de nuevo un préstamo”, consideró Adina Chelminsky, asesora en finanzas personales y autora de diversos libros relacionados con el manejo del dinero.

¿Conviene pagar deudas o invertir?

“Matemáticamente siempre va a convenir pagar deudas, porque las deudas siempre van a ser más caras que lo que vas a conseguir en instrumentos de inversión”, explicó Chelminsky.

Sin embargo, la inversión debe acompañar el proceso de desendeudamiento, aclaró.

Diversificar, la clave

1. Paga tus deudas. Si tú tienes varias deudas, no necesariamente tienes que abonar a todas, lo conveniente es pagarlas puntualmente para evitar cargos por demoras pero darle prioridad a la liquidación de las que tengan una tasa de interés y un Costo Anual Total más altos, recomendó Marco Carrera, vocero de la Condusef.

Otra opción es adelantar pagos a su hipoteca si la institución financiera no le cobra penalización por pagos anticipados. Pero si debes elegir entre las dos, mejor abona a los plásticos ya que las hipotecas a tasa fija no generarán más intereses y sus tarjetas sí.

“No dejes que se acumulen los intereses en tus tarjetas por pagar más a tu hipoteca, ya que los plásticos generalmente tienen una tasa de interés superior y cobran intereses sobre intereses”, abundó.

2. Ahorra. Recuerda destinar una parte de su aguinaldo al ahorro, ya que después de las fiestas, los gastos del año nuevo no desaparecen: renta, Predial, agua, luz, teléfono, colegiaturas y lo que se acumule durante el próximo año.

Los expertos indican que idealmente deberías destinar 10% de tus ingresos anuales al ahorro, pero si te cuesta trabajo desarrollar el hábito, existen los seguros de vida con componente de ahorro, recomendó Roberto González, director Ejecutivo de Negocio Privado.

“Para una mujer de 35 años que contrata un seguro por 2,430 pesos anuales a un plazo de 10 años tendrá una suma asegurada de 500,000 pesos que se le entregará en vida al finalizar el plazo del seguro o bien se le dará a sus beneficiarios en caso de que fallezca”, dijo.

3. Invierte. Para evitar que la inflación se coma tu ahorro, hay opciones de inversión a las que puedes acceder desde 100 pesos como el programa CetesDirecto, que ofrece rendimientos aproximados de 4.4% al año.

También existen los fondos de inversión a los que puedes entrar desde 500 o 1,000 pesos y tienen la posibilidad de tener rendimientos superiores según el plazo al que se invierta y el riesgo que quiera asumir.

Otra alternativa de inversión a largo plazo es hacer aportaciones voluntarias a tu cuenta de ahorro para el retiro en la Afore o a un Plan Personal de Retiro contratado con una aseguradora o una operadora de fondos de inversión.

Estas aportaciones además tienen beneficios fiscales, ya que son deducibles de impuestos.

4. Haz mejoras a tu casa. Impermeabilizar, pintar, hacer arreglos a las paredes afectadas por la humedad o cambiar el aluminio o madera de las ventanas que ya está en malas condiciones pueden ser una buena inversión.

Hacerlo no es un tema solamente de estética, sino que el valor del inmueble se conserva o incluso aumenta.

Otra buena opción es adquirir tecnologías para el hogar que generen ahorros como un refrigerador, inodoros de menor carga, cambiar sus focos incandescentes por lámparas ahorradoras o calefactores solares, entre otros.

Según datos de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía, la iluminación consume 40% de la energía en el hogar, 29% el refrigerador, 13% el televisor y 5% la lavadora.

Fuente: El Economista