Cuando éramos pequeños, año con año esperábamos con ansias la llegada del 30 de abril, esa única fecha en la que amabamos ir a la escuela porque no hacíamos nada más que jugar, comer dulces y celebrar el Día del Niño.
Pero ¿sabías que siempre lo hemos celebrado mal? Así como lo leíste.
Para empezar la fecha oficial en la que el Día del Niño se conmemora es el 20 de noviembre, día que fue establecido por la ONU con el fin de reafirmar los derechos Universales de la Niñez y poner énfasis en las necesidades de los niños.
Aunque, también fue la misma organización la que sugirió que cada país estableciera la fecha que quisiera para festejarles, (sí, te diremos porqué en México es el 30, ten paciencia).
Como lo mencionamos anteriormente, el 20 de noviembre quedó institucionalizado como el Día Universal de la Infancia, pero en México, como teníamos la opción de cambiarla, se pasó a otra fecha porque en esa ya tenemos una celebración.
Y como sabemos que ponías atención en tus clases de historia, sabrás cual en menos de cinco segundos. ¡Corre tiempo! (No hagas trampa)
… ¡EXACTO! La Revolución Mexicana, por eso en el Día del Niño fue instaurado en un inicio el 8 de mayo de 1924 en la ciudad de Tantoyuca, Veracruz.
Pero en 1924, tras firmarse la “Declaración de Ginebra”, el presidente Álvaro Obregón, lo cambió al día 30 de abril, ya que dicho documento estableció las garantías de los niños.
Ahora que ya sabes la realidad, puedes celebrar el día oficial, o bien ya te dimos pretexto para celebrar 3 días a tu niño interior.