¡Tranquilo, haz a un lado los nervios!

Algo importante que debemos tener en cuenta siempre es aprender a calmar los nervios ya que pueden ponernos en situaciones críticas. No nada más para que no digamos o hagamos cosas que no queramos cuando estamos en nuestros cinco sentidos, sino también por cuestión de salud.

Un ataque de nervios trae consecuencias fatales para nuestra salud, ya que si se junta con el estrés se podría sufrir ataques de pánico, parálisis facial y en el peor de los escenarios paros respiratorios o incluso infartos.

Si tu eres de esas personas que padecen de estrés y nervios, lo mejor que puedes hacer es poner una solución inmediata y empezar a llevar una vida mas tranquila y relajada.

Sonrisa nerviosa, manos sudadas, cambios en la voz, cambios en la expresión etc. Son señales de que estamos nerviosos y empezamos a estresarnos, te recomendamos que sigas estos consejos muy útiles para ti:

1. Practica: Si sabemos que nos ponemos nerviosos frente a algunas situaciones hay que aprender a calmarlas cuando estamos tranquilos o en situaciones no muy estresantes. Practicar será magnífico para cuando tengas una situación en frente que te ponga nerviosa.

2. Sonríe: Recuerda cosas lindas y que te hagan reír, la tensión se nota en el rostro, sonríe para relajar los músculos de la cara.

3. Repite en tu mente: “Todo va a estar bien”, “soy la persona más segura que existe”, “Merezco ser amada y respetada”, “No importa lo que pase, todo va a estar y estará bien”.

4. Respira: respirar profundamente es una de las pocas cosas que te relajaran, respira profunda y conscientemente.

5. Enfrenta tu temor: si ya sabes que estarás en una situación estresante, prepárate de antemano, repite frases positivas, no escuches música estresante ni a alto volumen. No pienses en el futuro, piensa en el presente y no te llenes de temores. Detén el miedo.

6. Relájate: Si ya estas estresada, lo mejor que puedes hacer es tratar de relajarte y evitar la irritación, porque seguramente tomarás decisiones incorrectas. Piensa en ti y en el daño que podrías causarte o causar a tu alrededor.

7. Escucha música con un tono relajante. Nos distraerá de lo que nos convierte el estómago en un nudo.

8. Imagina que la situación estresante ya pasó: Seguramente te ha pasado que la preocupación por algo excede a lo que realmente sucede y en cuanto termina la situación, te das cuenta de que en realidad no era para tanto y que todo el tiempo te estuviste preocupando de más. Y entonces llega a ti una sensación de alivio y descanso. Toma uno de esos recuerdos y revivelo, para que estés consciente de que después de la tormenta viene la calma. El hecho de imaginar el final hará que tu cuerpo trate de reproducir la sensación de alivio y descanso haciéndote mas llevadera tu situación presente

 

Fuente: Comunidad Fan