Con el nuevo Reglamento de la Ley de Movilidad de la Ciudad de México, publicado el viernes pasado, el gobierno capitalino busca restringir a los servicios de choferes privados, propone prohibir el de uberpool.
Además, pedirá exámenes toxicológicos a quienes manejen transporte público y para marchar se deberá tener un permiso con 48 horas de anticipación.
De acuerdo con el reglamento, tampoco se permitirán las “bolsas o paquetes” grandes que estorben a otros pasajeros en el transporte público masivo.
Entre otras restricciones que ahora tendrán los automóviles que ofrezcan el servicios de chófer privado (Uber y Cabify), los autos deberán tener menos de 10 años de antigüedad, estar registrados para este propósito ante la Semovi y tener calcomanía cero o doble cero.
Con respecto al Artículo 59, quedaría “prohibido el servicio de transporte de pasajeros privado especializado con chofer, que se genere a través de dos o más solicitudes con una misma unidad vehicular que realice el mismo viaje a diversas personas, en un mismo recorrido, trayecto o ruta”.
Según fuentes consultadas de la propia Semovi, con esto ya no estarán disponibles servicios como uberpool.