Hace un año, la opinión pública se conmovió por la desaparición de la niña Paulette Gebara Farah. Durante meses se especuló sobre las circunstancias de su muerte, si los padres estaban involucrados, si las nanas mentían.
El entonces procurador del Estado de México, Alberto Bazbaz fue el más criticado, e incluso fue removido del cargo por el gobernador Enrique Peña Nieto días después de que apareció la pequeña. El nuevo procurador, Alfredo Castillo, fue el encargado de continuar con las investigaciones y cerrar el caso.
Al final, las investigaciones de distintas instancias estatales y federales, e incluso con la participación del FBI, determinaron que Paulette murió asfixiada en su propia cama.
Hubo muchas dudas respecto; la opinión pública quería un culpable y no lo obtuvo.
Se creó el sitio Transparencia Paulette para responder las dudas que surgieron respecto al caso. Se respondieron preguntas generales y específicas, como: ¿Cómo murió Paulette? ¿De qué murió? ¿Por qué no la encontraban? Incluso contiene videos en el que el procurador Castillo explica todos los detalles del caso.
También se abrió una cuenta de Twitter (@CasoPaulette) para aclarar todas las dudas.
Por el escrutinio bajo el que se encontraban las autoridades involucradas, y las dependencias a su cargo, la investigación del caso Paulette fue muy minuciosa; incluso agencias extranjeras como el FBI y la Universidad de Granada participaron en ella, para asegurar que los resultados fueran certeros.
Por la misma razón, se llevó a cabo en tiempo récord, pues las procuradurías (del Estado de México, del DF y de la República) dedicaron todo su tiempo y personal para resolverlo.
Un año después de todo esto, hay una cosa que queda muy clara: cualquier tema puede ser usado como arma política o mediática, no hay límites. Hay quienes incluso están dispuestos a lucrar con la muerte de una niña de 4 años.
Fuente: La Primera Plana
