Un cumpleaños que hizo felices a 125 vagabundos

Armani Crews, una niña de apenas 6 años, tiene muy claras sus prioridades en la vida: ayudar a otros.

Días antes del 5 de marzo (fecha en la que estaba prevista la celebración de cumpleaños) le dijo a su madre que no celebraría su fiesta como lo tenían previsto, sino que tenía un mejor plan: quería darle la comida que sus padres habían comprado para la fiesta a los vagabundos que muchas veces veía dormir en las calles cercanas a su hogar.

Su madre, Artesha Crews, contó a los medios que durante varios meses Armani había insistido en alimentar a las personas sin hogar de su comunidad. Su madre preparó algunos bocadillos para ellos, pero la niña fue muy firme: “No quiero darles bocadillos, quiero darles lo mismo que yo tendré en mi fiesta de cumpleaños.”

Así que los Crews gastaron cerca de 300 dólares en comprar y entregar la comida a los vagabundos del vecindario East Garfield Park, de la ciudad de Chicago. Compraron pollo, pescado, espagueti, maíz, puré de papa, rollos, pastel, galletas, fruta y agua, y los prepararon tal y como lo hubieran hecho para una cena en su casa.

Armani quiso un regalo de cumpleaños especial, en vez de pedir un juguete o algo para ella, prefirió que el dinero se destinara a las mismas personas.
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La “fiesta de cumpleaños” fue todo un éxito: más de 125 personas asistieron y disfrutaron del banquete. La familia disfrutó tanto ofrecer lo mejor de ellos a quienes más lo necesitan, que planean hacer otro encuentro similar en poco tiempo.

Lo mejor de toda esta experiencia fue que la calidez del gran corazón de la pequeña comenzó a contagiar a todo el vecindario. Armani comentó sus planes en la iglesia local, y los miembros de la congregación decidieron ayudarla donando artículos de cuidado personal para crear paquetes para las personas sin hogar.

Cada paquete incluía: un cepillo de dientes, pasta de dientes, desodorante, desinfectante de manos y una merienda, que los 125 invitados se llevaron como regalo de la fiesta.
Cada paquete incluía: un cepillo de dientes, pasta de dientes, desodorante, desinfectante de manos y una merienda, que los 125 invitados se llevaron como regalo de la fiesta.

Éste es un hermoso ejemplo que, si más personas imitaran, podría cambiar la realidad de muchas más: ¿qué pasaría si todos destináramos un poco del dinero que gastamos de más para celebrar en los que menos tienen?

Armani demostró que ella pudo ser muy feliz en el día de su cumpleaños, ¡haciendo felices a 125 personas más!