La ciudad de Fukushima, situada en el norte de Japón, fue sacudida por un terremoto el 11 de marzo del 2011 que a su vez generó una fisura en el reactor de la central nuclear desatando el peor desastre nuclear desde Chernóbil.
Después de ser evacuada, la ciudad fue abandonada. Nadie había ingresado al área restringida hasta hace unos días.
El fotógrafo malasio Keow Wee Loong de 27 años, conocido como Kiwi, decidió en junio pedir acceso a la zona roja de esta región del país asiático para visitar los pueblos desolados de Fukushima. Sin embargo los trámites burocráticos tardarían entre tres o cuatro semanas por lo que Kiwi optó por escabullirse ilegalmente a los pueblos de Tomioka, Okuma, Namie y Futuba.
Kiwi compartió el pasado martes, a través de redes sociales, las fotografías tomadas sin permiso que muestran el estado de la zona, cinco años después de lo ocurrido. Las fotografías han generado ya millones de visitas.
Según el artista, el objetivo de la sesión fotográfica es generar conciencia acerca de los peligros del uso de energía nuclear.