El gobierno del socialista Yorgos Papandreu ha intentado cumplir con el acuerdo del FMI y de la UE de lograr el apoyo total a los recortes que se deberán aprobar el próximo martes para que Grecia siga teniendo apoyo financiero.
Así, Merkel ha calificado de “importante acuerdo político por la estabilización del euro” el que los 27 se comprometieran anoche a pagar la ayuda de emergencia de 12,000 millones de euros para evitar la suspensión de pagos este verano en Grecia, e iniciar el trabajo para un segundo rescate de alrededor de 110,000 millones, según ha afirmado hoy Papandreu.
Grecia necesita fondos económicos que hasta ahora han sido proporcionados por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, ya que sin ellos el país estaría en la bancarota. Esta situación afecta a toda la eurozona y es por tal motivo que han decidido seguir con el apoyo financiero siempre y cuando el parlamento griego acepte lo grandes recortes y medidas de austeridad.
En medio de esta aprobación, se encuentran la oposición de algunas representantes del mercado griego, el partido conservador Nueva Democracia y también algunos miembros del partido socialista PASOK.
El propio gobierno griego, por boca de su nuevo ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, reconoce que hay 3.800 millones del total que no están suficientemente acreditados.
Así, el presidente cuenta con 3 votos que serán clave para que Grecia pueda solventar sus problemas financieros, y los diferentes miembros de la Unión Europea exhortan a las fuerzas políticas griegas a respaldar las medidas para aprobar los ajustes necesarios, ya que con esto se llegará a la estabilización del euro.
Uno de los problemas está vinculado a las pocas garantías dadas a los bancos para que estén a favor del rescate, y el otro problema es un desfase de 5 000 millones de euros en el margen de maniobra de Papandreu. Así, el parlamento griego tiene que aprobar el paquete de reformas y privatizaciones para lograr el apoyo financiero que sacará a Grecia de la crisis.
Foto: La pauta
