Las armas de destrucción masiva con las que cuenta Libia están a salvo, y Estados Unidos mantiene una vigilancia constante de esos arsenales, afirmó hoy el vocero del Pentágono.
“Hemos estado y continuaremos vigilando los emplazamientos de esas armas químicas”, dijo en una conferencia de prensa el coronel Lapan.
En 2003 Libia renunció a su programa de armas de destrucción masiva para reintegrarse en la comunidad internacional, y al año siguiente accedió a la convención para la prohibición de este tipo de artefactos, lo que implica destruir sus arsenales.
Sin embargo, el país almacena todavía unas 10 toneladas de gas mostaza, aunque carece de medios para usarlas, según los expertos.
El paradero de Muamar Gadafi sigue siendo incierto, aunque el Pentágono cree que aún permanece en su país.
Por lo pronto, el presidente del Consejo Nacional Transitorio (CNT, órgano de gobierno de los rebeldes), Mustafa Abdul Yalil, ofreció hoy una recompensa de 2 millones de dinares libios (un millón y medio de dólares) a quien capture a Gadafi “vivo o muerto”.
Fuente: Agencia EFE
