¿Ya viste los mejores orgasmos del cine?

Tenga o no razón Meg Ryan, en When Harry Met Sally, de que los hombres no saben distinguir entre un orgasmo verdadero y uno simulado; las siguientes películas muestran  que las actrices pueden interpretar las sensaciones, gritos, palpitaciones, sudoración, a tal grado que quienes vieron la película creyeron que sí fue real. Juzguen ustedes…

1. When Harry Met Sally / Cuando Harry conoció a Sally (1989)

Conocida como ‘Deli scene’, esta es la escena de orgasmo femenino por excelencia, aunque haya sido fingido. La protagoniza Meg Ryan, que en ese entonces apenas tenía 26 años, ha confesado en repetidas ocasiones la gran vergüenza que sintió al grabar esta escena, además de que tuvo que hacerla una y otra vez delante de muchas personas en un restaurante. Sally quería probarle a Harry que los hombres no pueden distinguir entre un orgasmo verdadero y uno simulado.

2. Barbarella (1968)

Una película de ciencia ficción-comedia en donde, en ese entonces, la recatada Jane Fonda saltó a la fama y la convirtió en un símbolo sexual. Ella interpreta a Barbarella, la mujer más sexy del espacio. La historia de su orgasmo se da al conocer al malvado doctor Duran-Duran, inventor de una máquina que asesina a través de orgasmos.

http://youtu.be/FJmSdiRahpU

3. Amélie (2001)

En esta película francesa del director Jean-Pierre Jeunet, no aparece solo una escena si no un recuento de tomas de mujeres de todas las edades teniendo un orgasmo con su pareja. Todo surge porque Amélie, siempre muy curiosa en los detalles que parecen no importarle a nadie, se pregunta: “Cuántas parejas estarán teniendo un orgasmo en este momento en París”… “¡Quince!”.

4. Bruce Almighty / Todo poderoso (2003)

Bruce, el protagonista (interpretado por Jim Carrey), un ser humano común y corriente, obtiene el poder de ser Dios por una semana. Así que, aprovechando ciertas facultades del Todo poderoso, le da placer sin límites a su esposa Grace (Jennifer Aniston).

5. Young Frankestein / El joven Frankestein (1974)

El joven Frankestein es una clásica parodia de las películas de terror de los años 30. En esta la actriz Madeline Kahn obtiene su orgasmo de una forma muy particular: cantando. Gracias a esta interpretación, Kahn estuvo nominada un Globo de oro como mejor actriz de reparto.