A partir del año que viene, las personas con adicción a las drogas de Irlanda podrán usar salas de consumo bajo supervisión médica en Dublín. Más adelante, le seguirán ciudades como Cork, Galway y Limerick, según ha anunciado el ministro del Estado para Nuevas Comunidades, Cultura e Igualdad, Aodhan Ó Ríordáin.
Ó Ríordáin ha hecho un cambio sustancial en su discurso. Antes, el Partido Laborista promovía la “intervención temprana y el apoyo a los jóvenes”. Ahora, en cambio, planea despenalizar la posesión de pequeñas cantidades de sustancias como la cocaína, la heroína y el cannabis.