En Fordhouses, Reino Unido un joven de 22 años fue capaz de meter su cabeza dentro de microondas con el fin de obtener likes o seguidores en su canal de YouTube.
Los amigos del joven mezclaron siete bolsas de Polyfilla y vertieron esta sustancia en su cabeza cubierta por una bolsa de plástico, pero la sustancia secó demasiado rápido por lo que ya no pudo liberarse del electrodoméstico.
De acuerdo con los medios locales, fueron necesarios 5 bomberos, quienes trabajaron durante horas para auxiliarlo.