En la actualidad, las enfermedades cardiovasculares conforman la principal causa de muerte en las mujeres mayores de 50 años de edad en México.
La mayoría de las mujeres en nuestra sociedad están muy consientes y participan activamente en las campañas de prevención del cáncer pero falta cultura en cuanto a la prevención de las enfermedades cardiovasculares.
Aunque la incidencia de enfermedad coronaria aumenta conforme la edad, existe una edad a la que podemos llamar la edad crítica para las mujeres, y es alrededor de los 60 años de edad.
Una de cada 23 mujeres adultas puede fallecer de este grave problema, una de cada tres mujeres va a morir de un infarto.
Lo más preocupante es que la mayoría de las mujeres que están sufriendo un infarto no reconocen los síntomas y piden ayuda demasiado tarde.
La prevención de la enfermedad coronaria es prioridad en las mujeres, ya que a diferencia de los hombres, las mujeres sufren con mayor frecuencia infartos fulminantes.
Las mujeres que están en mayor riesgo son quienes no hacen ejercicio, tienen sobrepeso, fuman, tienen ovario poliquístico, hipertensión arterial, diabetes y quienes tienen historial familiar de infartos.
Las manifestaciones de un infarto en las mujeres suelen ser diferentes que en los hombres, serán molestias vagas en el pecho, sensación de falta de aire, náuseas, dolor en “la boca del estómago”, fatiga en los últimos meses o malestar general acompañado de malestar estomacal.
Las madres de familia son ejemplo a seguir, tienen una misión muy importante, transmitir una cultura de vida saludable, buena alimentación y la practica de ejercicio.
Cuidemos los corazones de las mujeres así como los de toda la familia, la sociedad y el mundo.
Con información de Día Mundial del Corazón.
