Una tarde tranquila en Estados Unidos se convirtió en algo trágico cuando un chico mató accidentalmente a su hermano gemelo intentando cazar una serpiente.
El lunes, cerca a las 4 p.m., los gemelos jugaban cerca a su casa cuando del drenaje vieron salir una serpiente. Los hermanos decidieron regresar a su casa y tomar unos fusiles calibre 22 para matar al animal.
Volvieron al drenaje y cuando uno de ellos apuntó a la serpiente, el otro se agachó y se interpuso, sin querer, entre el cañón del arma y el animal. El arma se accionó y recibió un disparo en la cabeza, justo arriba de su oreja derecha.
El hermano llamó al 911 y a la escena llegó el alguacil del condado, en Texas, donde intentó reanimarlo aplicando los primeros auxilios.
Luego fue llevado en un avión al hospital Herman Memorial en Houston. A pesar de la gravedad de la herida, había esperanzas que pudiera sobrevivir; sin embargo, Kollsen Carter, de 14 años, murió este miércoles.
El capitán de la policía, Ken DeFoor, dijo que el accidente debe servir de lección para que los padres tengan más cuidado con las armas que dejan en casa.
“Estas armas las dejan en los hogares sin ninguna supervisión. Debe haber un entrenamiento de cómo se utilizan. Estos chicos tenían 14 años. Definitivamente tenían edad suficiente para ser entrenados en el manejo de las armas, en lo que deben hacer y lo que no deben hacer. ¡Nunca ponerte frente a un cañón! Fue un acto no pensado que tuvo un desenlace trágico”, dijo el policía.
Con información de Infobae.
