Gracias a sus extensos conocimientos de artes marciales, un hombre de 63 años de edad sobrevivió a un ataque de oso negro, de acuerdo con la policía de la prefectura de Gunma, en el centro de Japón.
Mientras el hombre pescaba en el río Jizo, un oso se acercó, hicieron contacto visual y se abalanzó en su contra. Parecía que el destino del anciano era morir, pero terminó siendo una épica batalla que ganó gracias a que ha practicado karate desde hace décadas. La clave para ganar esta batalla fue que el señor tiró golpes a los ojos del animal, por lo que salió huyendo.
El karateka resultó con heridas en el rostro y brazo derecho, pero tuvo oportunidad de conducir hasta el hospital más cercano y curar sus heridas.