Una noche de intimidad entre una maestra y su novio en Inglaterra se convirtió en una vergonzosa experiencia, cuando un vibrador de 17 centímetros se atoró adentro de la chica.
Emma Phillips, de 24 años, y Lee Miller, de 29 años, decidieron usar su juguete sexual para hacer más interesante su noche, pero él hombre se dejó llevar por el momento y empujó demasiado el vibrador, hasta que éste desapareció en al parte trasera de ella.
Al principio, Emma pensó que su novio estaba bromeando cuando le dijo que ya no podía ver el vibrador y ella pensaba que lo estaba escondiendo en alguna parte del cuarto.
Se puso a buscarlo alrededor de la cama, pues pensó que tal vez se había caído y cuando se recargó boca a bajo sobre la cama, sintió la vibración en su abdomen.
Durante una hora, intentaron sacarlo y decidieron usar utensilios de cocina para hacerlo, como unas pinzas para el asador. Pero tras varios intentos fallidos y una hora después, se resignaron a llamar a la ambulancia, pues ambos habían tomado y no podían manejar al hospital.
Tras un procedimiento de 90 minutos, los doctores lograron retirar el vibrador de su cuerpo.
En una entrevista posterior al accidente, Emma dijo que espera que este accidente sirva para que otros sepan que hay que buscar ayuda médica pronto, cuando suceda un accidente sexual como el suyo.
