En vez de optar por los dulces, estos padres prefirieron las travesuras.
La idea fue del presentador de televisión Jimmy Kimmel, que desafió a sus espectadores a que grabaran a sus hijos luego que ellos les dijeran que se habían comido todos sus dulces de Halloween.
Como podrás imaginarte, la reacción de los niños a la broma de sus “amorosos” progenitores no tiene pérdida.
Los crueles y graciosos videos fueron compilados por Kimmel, quien expuso el resultado del desafío en la última edición de su late show. En las imágenes vemos a pequeños de todas las edades llorando a mares por sus dulces y a padres riéndose de buena gana.
Fuente: 24 Horas