Una señora de 79 años se escapó de la residencia para personas de la tercera edad en la que habita para realizar uno de sus sueños.
La abuela de 11 nietos abandonó la residencia Daleview House sin que nadie se diera cuenta. Fue su hijo Tony Sellers, de 57 años, quien se dio cuenta de la ausencia de la mujer al visitarla. Resulta que su madre había “escapado” para hacerse su primer tatuaje con su nieta Samantha.
Tony solía ser funcionaria pública en Irlanda del Norte. Su hijo Tony es camionero y tiene 8 tatuajes, al igual que Samantha.
“Le pregunté al tatuador cuánto iba a tardar y me dijo que lo había acabado hace 5 minutos. No sentí nada”.
“Entré y había tres veinteañeros enormes llenos de tatuajes, y en medio de ellos estaba mi madre haciéndose uno. Todos pensaban que era fantástica”, dijo su hijo.
Cuando le preguntaron qué pensaría su familia de su tatuaje, Sadie respondió: “Me importa una mi*rda. Cuando llegas a mi edad solo hay que vivir la vida al máximo todos los días”.
Con información e imágenes de La Bioguía
