En Alemania, Oliver Struempfel rompió el récord mundial de repartir cervezas al cargar 29 jarras de un litro a lo largo de 40 metros.
Struempfel superó su propio récord, que había sido de 25 litros, derramando menos del 10 por ciento de las bebidas y dejando caer solamente dos recipientes de 31 que cargaba.